Estimados,
Lo intentamos, pusimos
en práctica el plan de juego, olimos la sangre, luchamos como tiburones,
estuvimos a punto de lograrlo, pero al final sucumbimos en los 2 únicos
despistes que tuvimos…. Una lástima, pero así es el futbol: al que no hace, le
hacen!
Los de Centro
Portugués les costó la gota gorda y parte de una bola poder siquiera tocar la
pelota con fluidez. Nuestro sistema 4-5-1 funcionó a la perfección durante el
1er tiempo y parte del 2ndo (hasta que anotaron el 2-1). La maraña de pies en
la Media los obligó a jugar -el más de las veces- al balonazo largo, totalmente
inefectivo pues la línea defensiva observó estrictamente el posicionamiento dejando
en fuera de juego a los delanteros del CP. La cantidad de Medios obligó también
al CP a intentar tiros desde lejos, ya que no había forma de que llegaran al
arco usando paredes, como están acostumbrados.
Defensivamente,
secamos totalmente a los delanteros del CP, gracias también a la colaboración
de quienes estaban en la contención media. A pesar de que ofensivamente no contábamos
sino con 1 atacante, sin embargo en más de una oportunidad los pusimos en serios
aprietos, sobretodo cuando bajábamos por las bandas.
En uno de esos tiros
que se hacen desde lejos mas por azar que con intención, el CP anotó el 1er
gol: un lechazo que luego de golpear el travesaño rebotó en la cabeza de PPG y
se introdujo al arco. Ni los propios CPs se creían que habían podido finalmente
romper el hechizo al que los habíamos sometido!
Nosotros, sin mayor
desesperación, seguimos instrumentando nuestro plan, y poco a poco fuimos
siendo mas incisivos hasta que por fin se produjo una internada de Barreneche,
quien fue derribado cuando iba a fusilar: PENALTY! y conversión en gol por
parte de Arturo.
Los CPenses estaban
anonadados: en su vida se imaginaban que íbamos a ser capaces no solo de
enredarles el papagayo, sino de empatarles el partido!
El 2ndo tiempo empezó
aún mejor, para nosotros. Se hizo un cambio táctico y César pasó a ser el punta
único del equipo: y se comió 2 goles que, de haber entrado, le hubieran
cambiado la faz al partido.
Sin embargo, tal vez
le agarramos demasiada confianza a nuestras posibilidades y empezamos a ser
menos estrictos en nuestra disciplina táctica. Tal
vez, no “leímos” el cambio de planteamiento de los CPenses, quienes dejaron de
jugar al balonazo largo o al chute desde lejos y más bien se dedicaron a buscar
la “jugada individual”.
El hecho es que como a
los 20 minutos del 2ndo tiempo se produjo la jugada “decisiva” del partido: el
delantero del CP se dribló en la frontal del área a 3 de nosotros en menos de medio
metro cuadrado y metió un guamazo inatrapable.
Unos poquísimos
minutos después, otro despiste por la lateral derecha en acción individual
terminó de poner cifras definitivas al encuentro.
Sin embargo, nosotros intentamos
hasta el final recortar el marcador a pesar de que ya las fuerzas y energías
estaban tocando rojo, pero sin mayor éxito.
Hoy tampoco me atrevo
a señalar los merecedores del PODIUM, pues el equipo jugó como eso: como un “equipo
engranado”, cada quien jugando de la mejor manera posible en el rol que le tocó
desempeñar. Tal vez, valga la pena destacar la actuación de Guillo y Demetrio
en la Media, que “valdesanas” aparte, ayudaron a rotar el balón y a romperle el
ritmo a los CPenses.
Y aunque salimos ARRECHOS del partido, fue un
ARRECHO BUENO, de aquellos que “satisfacen”, valga la “rebuznancia”: fue porque
entendimos que con un pelín mas de suerte y concentración, tal vez hubiéramos
podido hasta ganar el partido.
Así que ANIMO: todavía
hay torneo que jugar y podemos lograr una posición destacada en la Liga.