lunes, 20 de abril de 2015

CARTA ABIERTA a los Masters

Estimados,

Esta no va a ser una OPINION DE LOS LUNES. Esta es una “carta abierta a los integrantes de la MASTER LOYOLA”. Reitero una vez más: es MI OPINION, y por eso escribo desde MI PERSPECTIVA, aunque trate de ser lo más objetivo posible. Pero esta vez voy a ser subjetivo. Si alguien quiere escribir de ahora en adelante la “Opinión de los Lunes”, bienvenido sea.

Voy a empezar con hacer unas semejanzas y parangones entre lo visto por TV y en vivo este fin de semana en cuanto al fútbol se refiere. Luego de ver el Chelsea vs. ManchU, Barza vs. Valencia, Inter vs. AC Milan, Loyola vs. Villa Loyola, Fe y Alegría vs. Loyaltarras y Los Cortijos vs. Altius, solo puedo decir una cosa: te paguen una millonada o lo hagas por pura afición, en el Fútbol NADIE ES PERFECTO!

Estuve particularmente atento a la cantidad y TIPOS (sobre todo estos) de errores que los jugadores cometieron en las 3 zonas del campo, y no solo para mi propia tranquilidad sino para la tranquilidad de todos, pude confirmar –una vez más- que en la MASTER cometemos los mismísimos errores e incurrimos en las mismísimas fallas técnicas no solo de los jugadores profesionales ultrapagados, sino también de los jóvenes amateurs, a pesar de tener éstos últimos más reflejos y más “masa muscular”.

CUAL ES LA GRAN DIFERENCIA, entonces?
Si la hay…..
Y esta es el comportamiento general en el campo!!!

Y ustedes dirán: “de qué coño estás hablando?”
Pues simple y sencillo: a pesar de incurrir en las los mismos errores y fallas técnicas, los PRO y los Amateurs, con escasas excepciones (del tipo CR7, y por eso me cae tan mal) no sólo no exteriorizan o no le dicen ni pio en campo al compañero que se equivocó, sino que se apoyan y se dan ánimos entre ellos.

IGUALITO QUE NOSOTROS PUES, que estamos “a la caza” de que un compañero cometa un error para GRITARLE y MALTRATARLO EN PUBLICO A TODO GAÑOTE, tanto dentro del campo como desde la banca! Claro que eso es solamente dirigido hacia algunos, porque hay otros “escogidos” que se creen por encima del bien y del mal, que creen que nunca fallan y a quienes nadie les dice “ni ñé” así la hayan “metido hasta el fondo”.

Y cuando uno se “rebela vigorosamente” porque le parece INJUSTO que “lo apunten” como el malo de la partida, a pesar de estar haciendo las cosas como las haría cualquier futbolista PRO, entonces entramos -como equipo- en una espiral NEGATIVA que nos hace “percibir” que la estamos cagando, cuando realmente el hecho es que el otro equipo es netamente superior o, simplemente, tuvimos todos  -técnica y tácticamente- un mal día a pesar de ser superiores.

ESO FUE LO QUE NOS PASO EN EL 1ER TIEMPO del partido del Sábado pasado, que terminamos perdiendo absurdamente 2-0.

Voy a ser extremadamente duro, y si me quieren sacar del equipo “por conflictivo” (nunca lo he sido, y más bien soy de los que siempre está dando soporte y apoyo al compañero que falla), pues aceptaré sumisamente y sin chistar la decisión.

Algunos de nosotros están “claramente” fuera de forma y fuera de posición, fuera de “timing” y con la cabeza en otro lado. Ponerlos a jugar (y que ellos todavía acepten hacerlo!) sólo porque son –sobre el papel- “mejores que otros”, no tiene mayor sentido si lo vemos en función del equipo.

Por supuesto, uno no puede saber cómo va a estar su “biorritmo deportivo” ese día, o sea, si va a jugar mal, bien o discretamente, pero cuando uno se detiene a ver las últimas actuaciones individuales, nota si la “curva” es ascendente o descendente. ES NORMAL – de paso- que eso suceda. Es el famoso “slump” de los jugadores de beisbol, que luego de conectar hits hasta con la punta del pene, de pronto no le pegan a una recta franca por el medio del home ni con una puerta del tamaño de una catedral.

Bueno…hay algunos de nosotros que están metidos en ese “slump”, y no solo no lo quieren reconocer, sino que para tapar su mal momento físico-técnico, le empiezan a gritar al compañero que ha cometido un error del tipo que cometen hasta los futbolistas mejores pagados. Y entonces se crea el caos, se desata el círculo vicioso que mencioné arriba, y el equipo empieza a jugar “a trompicones” como si fuera una caimanera, y el “performance” de aquel que viene con el “slump” desaparece mágicamente del mapa.

NO ME LA CALO, pues….. NO ME LA CALO MAS!!!
O CAMBIAMOS LA ACTITUD, o simplemente dejo –sin problemas, sin llanto y sin resentimiento.

Yo creo haber jugado un buen partido, cubriendo no solo mi zona en la banda derecha, sino haciendo un esfuerzo extra para jugar de “CENTRAL” al lado de Talos, porque el otro central, o sea, Chuni, estaba literalmente “perdido en el espacio” desde el punto de vista táctico, y desde el punto de vista técnico….pues ni hablar! Ni un solo pase o apoyo decente. Y para colmo, se enfrascó en varios dribblings totalmente innecesarios que nos pudieron costar más de un gol.
Ese “doble posicionamiento” mío no me permitió intentar ni siquiera una subida por la banda derecha, y dar así mi aporte ofensivo. PERO NADIE LE DIJO NADA A CHUNI (bueno…yo sí, que lo “invité amablemente” varias veces a asumir su posición y a no dejar desguarnecido el Centro)!!!

Cuantos balones perdieron Talos y Anibal atrás? MUCHOS!
Cuantas veces le metieron balones a las espaldas de Talos, gritándome que cerrara allá donde hubiera tenido que estar Chuni, y estando yo en marcación del extremo izquierdo de Internacional? PERDI LA CUENTA!
Cuantos pases malos hicieron Luis Miguel, Anibal, Alejandro, Nacho, Talos etc? CENTENAS!
Cuantas veces Chuni y Anibal habilitaron el fuera de juego? DECENAS
Pero NADIE, absolutamente NADIE, les dijo “ni ñé”!!!

Ahhhhh!!!.... pero me equivoqué (y lo reconocí honestamente y pedí perdón a todos!!!) en un despeje, y me gritaron TODOS como si hubiera cometido un crimen sancionable con la muerte! En otra jugada DECIDI (y lo recalco…DECIDI…) entregar el balón a Guillermo Arenas, que estaba en el círculo central, y al unísono Luis Miguel y Talos me gritaron como si hubiera cometido el peor error posible, cuando la jugada era la normal y más simple de hacer en vista de que Nacho estaba marcado en la banda y tanto Luis Miguel como Talos tenían atrás a un adversario presto a quitarle el balón (por cierto, todavía ayer Luis Miguel me la estaba reclamando!). Y finalmente, cuando intenté “tímidamente” colocarme más arriba en apoyo de una jugada de ataque, alguien de la delantera me gritó en tono de reclamo “…Giovaanniiiiiiii…con la cabezaaaaa!” por un balón que venía por el piso hacia la punta adversaria. En ese momento, perdí los estribos.
NI SIQUIERA VOY A PEDIR DISCULPAS POR HABERME QUITADO LA CAMISA Y SALIDO DEL CAMPO, pero la verdad es que esa fue la gota que rebasó el vaso.

 Yo solamente se algo: estoy en buenas condiciones físicas y trato de mantenerlas ejercitándome diariamente, porque me preocupo por mi salud general (“mens sana in corpore sano”, decían los Romanos antiguos).
También estoy consciente que soy un jugador “normalazon”: pero luego de haber visto los partidos que mencioné, hasta me atrevería a decir –inmodestamente- que tal vez estoy en el “promedio bueno” de esta categoría. Devuelvo el balón de 1era; soy bastante preciso en los pases; no soy “goloso” con la pelota; tengo “visión periférica” por lo que JAMAS habilito un fuera de juego ya que me coloco siempre en línea o medio paso adelante del Central que sobra; tengo, además, una visión “triangular” del juego corto (siempre tengo en mi mente alternativa de pase por lo menos a 2 compañeros), y –tácticamente- creo que aporto bastante con mis subidas (la mayoría del tiempo son inútiles para el juego, pero obligan a la defensa del otro equipo a marcar al menos 1 más adelante). Si me pusieran a jugar donde de verdad puedo rendir más, o sea, de interno derecho (en cristiano: contención derecha), estoy seguro –porque ya lo he demostrado- que mi aporte al equipo sería aún mayor, considerando –REPITO- que puedo correr, marcar, recuperar y entregar balones 40-60 minutos sin pausa. Mi problema mayor es que no me gusta ir al choque, pero hasta en eso he hecho un esfuerzo importante: “queriendo o sin querer”, en los últimos partidos no solo me he puesto más duro en los choques, sino que le he dado una buena ración de “medicina preventiva” a los delanteros que vienen por mi lado.

Ustedes dirán: “…no seas, webón, Giovanni. Si necesitas justificar cómo juegas es porque no tienes confianza en ti mismo o, de verdad, no sabes jugar”.
Bué… si hubiera sido muy bueno, seguramente hubiera intentado ser jugador profesional (les recuerdo que mi Papá me llevó al Real Madrid y empecé a entrenar con los alevines, pero luego estuve enfermo casi 1 año, y ahí se me acabó la carrera). Pero como la gran mayoría de ustedes, he jugado futbol “amateur” toda mi vida y, apartando las serias lesiones que he sufrido (menisco, 3 roturas de ligamentos, la espalda, desgarres musculares etc) que me han originado la “falta de confianza en mis rodillas”, lo sigo haciendo pero con cierta dosis de “precaución” (por eso no me gusta ir al choque)…aunque ayer Domingo no fui tan “precavido”, porque fui al choque con un Juvenil, quien me metió su rodilla en mi cuádriceps derecho y me sacó el gato, el perro, el tigre, el elefante y cuanto animal se anida en esos músculos (todavía ahora tengo un dolor intenso, a pesar de los calmantes).    

Es increíble, además, notar la “inmensa falta de confianza” que me tienen y que por supuesto me afecta un poco. Prefieren jugar por una “zona colapsada” del campo que jugar hacia mi banda (cualquiera que sea), usualmente desértica y solitaria. Pero yo no me pongo “histérico” (como otros) por eso: lo acepto como parte del juego de equipo, pues entiendo que mi función es correr, marcar y tocar pocos balones.    

El segundo tiempo lo jugamos muchísimo mejor porque TODOS “cerramos el pico”, dejamos de criticarnos y pegarnos gritos, y –más bien- nos dimos ánimos mutuamente. 2 errores (NINGUNO MIO, por cierto) nos costaron el partido, pero fueron asumidos como tales…errores que pasan el futbol y que naturalmente inclinan la balanza. PORQUE DE ESO SE TRATA EL FUTBOL: buscar que el otro equipo cometa errores aprovechables. Y quien los aprovecha mejor, GANA! Tan simple como eso.

Creo que Albert Einstein fue quien dijo, palabras más palabras menos, que no podíamos cambiar un resultado si seguíamos haciendo siempre lo mismo. Insistimos en las mismas cosas a pesar “de saber” que el resultado va a seguir siendo malo.-  ESTAMOS PARA DIVERTIRNOS, no para pasar un mal rato. Si GANAR significa pasar un mal rato, pues…paso!!! Yo puedo correr como un burro 90 minutos y no tocar ni un solo balón, y me divierto un mundo, gane o pierda.

Pero no toleraré más que me “caigan encima” al más mínimo error al que todos estamos expuestos, que cometemos con muchísima frecuencia, aún los “cracks”, y de paso que yo pague las frustraciones “físico-técnico-tácticas” de otros.  

Yo no sé dónde aprendieron a jugar futbol pero los Mister que yo tuve siempre me dijeron, mas o menos: “JUEGA CALLADO, y  escúchame a mi nada más cuando te dé instrucciones desde afuera!!”Bueno… YO JUEGO CALLADO (hasta que me revientan los cojones con sus reclamaderas injustas)…
HÁGANLO USTEDES TAMBIEN!!!


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